El lenguaje escrito es un convención social por el cual queremos reproducir el lenguaje oral. Dentro del lenguaje oral hay diferentes factores que influyen en la comunicación. La comunicación no es sólo la transmisión de palabras. También dentro de la comunicación influye la entonación, que nos viene dada por la ortografía y la puntuación. Una buena puntuación nos ayuda a comprender el sentido de la frase que leemos o escribimos.
Los signos de puntuación de que disponemos en español son: el punto, la coma, punto y coma, dos puntos, puntos suspensivos, signos de interrogación, de exclamación, paréntesis, corchetes, guión y comillas.
Es la expresión gráfica de final de enunciado y puede ser de dos tipos:
-Punto y seguido: separa los enunciados que están dentro de un mismo párrafo. Los enunciados que están en el mismo párrafo tienen contenidos similares. Después de un punto y seguido se deja un espacio y se continúa en la misma línea. La pausa es breve.
-Punto y aparte: separa los enunciados de párrafos diferentes. Tienen informaciones diferentes. El nuevo párrafo continúa con una nueva información.
El punto también acompaña a las abreviaturas: "Sr." (Señor), "Sra." (Señora), etc. Pero hay cierta tendencia a eliminarlo de las siglas: "EEUU, OTAN, CEE...", aunque antes era común escribirlos.
Indica una pausa breve en un enunciado. Separa los miembros de una enumeración en la cual los dos últimos miembros suelen ir separados por las conjunciones y, o, y sus variantes e, u, también por ni.
Vinieron Luis, Antonio y Paco.
También separa los elementos que son equivalentes gramaticalmente.
Aunque hemos mencionado arriba que los dos últimos elementos de una enumeración se unen por una conjunción, a veces esta conjunción va precedida de una coma si el elemento en cuestión expresa un contenido distinto a los anteriores.
Están todos en la fiesta, y traen los regalos.
Usamos la coma para separar los vocativos: Andrés, ven aquí.
Cuando tenemos una serie de palabras separadas por punto y coma, el último elemento va separado por coma o punto y coma.
Si en un enunciado tenemos una incisión para explicar o ampliar información del enunciado usamos la coma. Son los casos de proposiciones explicativas, aposiciones explicativas, menciones de autores, obras, etc.
Juan, que es mi compañero de cuarto, tiene 23 años.
En los casos de alteración del orden natural de los contenidos de un enunciado ponemos coma después del elemento pospuesto.
El punto y coma indica siempre una pausa mayor a la que indica la coma.
Si en una enumeración tenemos elementos complejos que van separados por comas, separaremos dichos elementos por punto y coma.
Colocó todo aquello en un orden preciso: los lápices, en el bote; la regla, en el cajón; los folios, perfectamente apilados; y la botella de agua, a su izquierda...
También lo usaremos para separar las proposiciones coordinadas adversativas y la proposiciones yuxtapuestas.
Yo lo invité; aunque no quiso venir.
En otros tipos de proposiciones podemos usar el punto y coma si la longitud de la proposición es muy larga. Preceden a la proposición a la que afectan.
Sirven para llamar la atención sobre lo que viene detrás de ellos, deteniendo el enunciado.
Pueden preceder una enumeración:
Vinieron todos la fiesta: Juan, Pedro, Luisa...
Se deben usar con citas textuales:
Descartes dijo: "Pienso, luego existo".
Se usa para resumir un enunciado o explicar una idea concluyente:
Todos discutían en la reunión, nadie se puso de acuerdo: cada uno mostraba su punto de vista y no escuchaba a los demás.
Los encabezamientos de las cartas van seguidos por los dos puntos.
Estimado señor o señora: ...
Los utilizamos cuando el receptor conoce el resto del enunciado:
A caballo regalado...
Si en un discurso tenemos una interrupción debido a una duda o temor podemos expresarlo con los puntos suspensivos:
Vamos juntos o... bueno, luego hablamos.
Cuando van entre corchetes en citas textuales significa que se ha suprimido parte de la cita.
Principalmente se usa en español para dos cosas:
Para hacer aclaraciones de partes del discurso que pueden llevar a confusión:
El hecho ocurrió en Toledo (Ohio).
En oraciones incidentales que no son del discurso:
Eso se debería hablar con el jefe (vamos digo yo).
LA INTERROGACIóN Y LA EXCLAMACIóN
En español estos signos son dobles. Existe uno que marca la apertura de la oración (¿¡), y otro que marca el cierre(?!).
Sirven para expresar las oraciones interrogativas (¿?) y las exclamativas y interjecciones (¡!):
¿Has llegado tarde de nuevo?
¡No tienes vergüenza!
¡Ay!
Cuando estos enunciados van precedidos de un vocativo, éste va fuera de la interrogativa y seguido de una coma:
Sergio, ¿has terminado?
Si el vocativo sigue al enunciado, se coloca dentro de la interrogativa o exclamativa:
¿Tienes suficiente dinero, Antonio?
Nunca van seguidas de punto, pero si pueden llevar otros signos ortográficos.
¿Estabas en la fiesta de Paco?, porque no te vi.
Generalmente los corchetes tienen el mismo uso que los paréntesis, con una información complementaria. Si los combinamos con otros signos , esta combinación se hace igual que los parántesis.
En los casos en que tenemos un texto que ha sido colocado entre paréntesis, y necesitamos el uso de una explicación en el interior de éstos usamos corchetes. La obra maestra de la literatura universal (y obra cumbre de Miguel de Cervantes [1547 - 1616]) fue el Quijote.
En poesía se coloca un corchete al principio de una palabra que no cabe en el verso anterior, pero pertenece a él.
Lo podemos usar aisladamente o bien combinarlo con otros signos de puntuación. Lo usamos cuando queremos expresar las diferentes intervenciones en un diálogo:
Juan contestó:
- ¡Me tienes harto!
- Pues no entiendo....
También puede tener una función aclaratoria. En ese caso debemos poner uno al principio y otro al final:
Marisa -la prima de Luis- estaba en el cine.
Las comillas las usamos para transcribir enunciados o frases que queremos reproducir textualmente: "pienso; luego existo".
En las novelas y géneros narrativos las usamos para transcribir los pensamientos.
También se usa para transcribir expresiones impropias en un texto: ¡qué "guay"!
Palabras en otros idiomas, citar libros, cuadros, etc.